"Fiebre" de sabado por la noche.


Y me quejo igual, porque hace aproximadamente cuatro horas que tengo dieciséis añitos (que diminutivo prejuicioso)y hasta ahora mis actividades fueron; cenar con varias de mis mejores amigas, rebotar en Nueva Córdoba, volverme en un taxi con chicos sin sentido de la caballerosidad, llegar a mi dulce y desierto hogar, ponerme el pijama o el invento nocturno super abrigado que uso y escuchar un tema muy meloso de Debbie Gibson.

Después de Debbie, tu vida automaticamente se marchita junto con tus ojos y te agarra la inevitable modorra, y no hay mejor cura para esta que ir a sonarse los mocos sentimentales a otra parte como mi cama, uno de los mejores lugares del mundo. Esta si que es la vida de la adolescente fiestera y friendly, y qué más podes pedir de una chica que tiene de idea de mascota ideal una tortuga y un cactus?ubicate, esto si que es una fiebre de sábado por la noche.